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03 abril 2011

El orden nos exime de ser libres

Una mujer temblorosa aprieta el brazo de su acompañante. Él vuelve hacia ella un rostro tan largo como un número de serie y dice: “El sesenta por ciento de los muertos por accidente en carretera son peatones”. La mujer deja de temblar: todo está controlado. A punto estuvo de creer que algo anormal ocurría, algo a lo cual debía responder con un grito, un espasmo, un ligero anticipo de la carne ante la gran salida, pero no: aquello es conocido y ya no la involucra; le pertenece a otros. Y él añade: “Han llamado a una ambulancia”, y ella se relaja, su angustia la abandona: el orden nos exime de ser libres, de despertar en otro, de despertar por otro. A punto estuvo de gritar, desde esa carne ajena, pero el orden contuvo a tiempo ese delirio. (Chantal Maillard)

08 abril 2009

El acontecimiento y la nada

(Foto de Cartier Bresson)

“Un acontecimiento es un aroma a la espera de que alguien lo perciba?

El acontecimiento tiene lugar en este instante, para mí, y tal vez en aquel otro en que Ud. lea mi respuesta y tal vez en el instante en que alguien llegue a ambas, no lo sé. El acontecimiento se da siempre y cuando haya alguien lo suficientemente alerta como para que una pequeña nada le importe y haga impacto.

(Chantal Maillard)


28 marzo 2009

El Arte y la interioridad

(Cuadro de Karel Appell)

Lo que llamamos Arte y Literatura tiene una historia muy reciente, poco más de dos siglos apenas y tiene que ver con la aparición de una forma de apreciación que se ha denominado “gusto estético”. Esto se generó al tiempo que la sociedad burguesa y los museos. Es un gran error creer que el Arte con mayúscula es algo que ha existido siempre. Lo que había, anteriormente a esto, eran oficios y personas que sabían hacer cosas con un determinado fin. La poesía, en sus inicios era un arte mnemotécnico, servía para recordar, cuando la tradición se perpetuaba oralmente.

Por otra parte, la “interioridad” tampoco es un concepto que haya existido siempre; nació con el individualismo. En una sociedad en la que todos hacen lo mismo y en la que los sentimientos son similares porque corresponden a experiencias semejantes, en sociedades cuyos miembros se diferencian poco, ¿podría acaso hablarse de interioridad? La interioridad requiere el concepto de diferencia y esto también es algo que tiene una historia.

Lo que ocurre es que todavía vivimos de los rescoldos del romanticismo.

(Chantal Maillard)


18 junio 2007

La tristeza y la esperanza

La tristeza es el gran pecado de Occidente y uno de los grandes pecados que deben ser evitados en Oriente. Es uno de los síntomas del deseo y si la erradicamos, la paz y el amor son posibles. Me considero una gran pecadora occidental porque la tristeza me define.... ¿Tiene esperanza? No. Creo que hay que erradicarla, la esperanza es parte del deseo (Chantal Maillard)