28 enero 2011

La cigarra y el sufrimiento bioquimico

Carpe diem”, cualquiera no aprovecha el momento. Hay que pensar en el futuro, la cigarra y la hormiga, por lo menos la cigarra se lo ha pasado bien, ya sabemos creatividad, narcisismo , aumento de endorfinas y varios. La hormiga todo el día currando, aunque realmente no puede hacer otra cosa, en sus genes no esta la diversión. Que sucedería si una vez llenos los depósitos de grano le dicen a la hormiga que hay que seguir trabajando porque las previsiones demográficas no dan para tanto y además alguna hormiga ejecutiva se ha dedicado a trapichear con el “grano basura”. No apostaría mucho por el aguante y la resignación de las hormigas. Aparte elucubraciones entomológicas yo necesito , lo he descubierto hace poco, varias unidades de “placer” al día. Como diría un amigo mío, tapar el sufrimiento bioquímico. Que si una cervecita, que si un cigarrito, que si un polvito, que si hacer algo de ejercicio, que si una tapita en el bar, que si una buena lectura, que si una película en la tele. Con los tiempos que vienen aparte de reducir el consumo habrá que reducir estas unidades placenteras. Siempre me ha parecido que las cigarras se lo montan mejor, saben que van a acabar durmiendo en un cajero automático y nosotros seguramente también haciendo cola para retirar fondos, el corralito, pero no están toda la vida currando esperando una vejez con calefacción para que al final te digan que no puedes pagar el gas-oil. Los insectos no aguantarían tanto. “¡Carpe diem Cigarra! 

3 comentarios:

Karla dijo...

Ya no me culpo tanto... de niña no sabía exactamente por qué, me hacía sentir incómoda esta fábula. El placer es un bien vilipendeado durante siglos. Parece que el mundo tiene vocación de martir.

Saludos.

José Luis dijo...

Pues sí, nos tienen totalmente engañados. Pero ahora que ya no quedan dudas de lo que hay, la metamorfósis a cigarra es más que urgente.
Sí, Carpe diem!

Rafa dijo...

Lo que debe ser increible es ir de cigarra y encima que ta vaya bien. Mi admiración por las cigarras valientes. Gracias a Karla y Jose Luis por sus comentarios. Un saludo