10 diciembre 2009

El tranquilizante


Soy un tranquilizante.
Eficaz en el hogar y
efectivo también en la oficina,
me siento en los exámenes
y me levanto en los tribunales.

Esmeradamente arreglo artefactos rotos-solo tómame,
disuélveme bajo de tu lengua,
solo trágame,
solo bébeme con un poco de agua.

Yo sé que hacer con la mala suerte,
cómo echar abajo una mala nueva,
aminorar la injusticia,
iluminar la falta de Dios,
elegir un sombrero para la viuda.

Qué esperas,
confía en la compasión química.

Eres joven aún,
deberías resolver tu situación de alguna manera.
¿Quién dijo
que la vida has de afrontarla con valentía?

Devuélveme a tu abismo,
que lo llenaré con el sueño,
me estarás agradecido
por el aterrizaje en cuatro patas.

Véndeme tu alma,
no encontrarás otro comprador.

No hay otro diablo.

(Wislawa Szymborska)

3 comentarios:

Rafa dijo...

Gracias por tu invitación. Un saludo

Leo.N dijo...

Tu blog es excelente...siempre me doy una vuelta a ller lo que posteas...gracias por compartir cosa con "contenido"!!!

Rafa dijo...

Gracias Leo, agradezco tu atencion con mi blog y tu aprecio. Un saludo